Elijan una de las siguientes actividades como una forma de reflexión sobre las lecturas del domingo:

• Redacten una oración de los “valores del hogar”. Comenten las prioridades y los valores de la familia. Identifiquen los valores que son más importantes para el hogar y escríbanlos. ¿Las prioridades de los miembros de la familia corresponden con las enseñanzas de Dios o deben ser ajustadas? Mantengan la oración escrita en su casa como un recordatorio para la familia de los que es realmente importante en la vida.
• Reflexionen sobre cómo pueden usar sus posesiones, dinero y regalos al servicio de Dios y del prójimo. ¿Qué organizaciones en su comunidad ayudan a los necesitados? ¡Únanse a ese grupo!
• Planifiquen un tiempo de diversión familiar, si es posible, todo un día. Vayan a pescar, a jugar boliche o a esquiar, vayan a comer pizza. Usen este tiempo para que los miembros de la familia puedan olvidar sus otras preocupaciones y simplemente puedan disfrutar la compañía de los otros miembros. Hablen de lo que cada uno ha aprendido, logrado a hecho últimamente.
• Junto con sus hijos, organicen la alacena. Comprométanse por adelantado que su familia donará cosas apropiadas de la alacena a un comedor de beneficencia. Comenten con sus hijos que esto es parte de lo que Jesús quiso decir cuando exclamó: “Compartan sus dones con los demás”.