Elijan una de las siguientes actividades como una forma de reflexión sobre las lecturas del domingo:

• Juntos en familia, hablen de las cruces que a ustedes y a su familia se les ha pedido que carguen. (Ejemplos: enfermedad, preocupaciones financieras, asuntos escolares, etc.). En una cruz de cartulina, escriban qué cruz ustedes, en familia, van a ayudar a cargar para aliviar la carga de cada uno de los miembros.
• Planifiquen un tiempo de oración familiar. Cada miembro de la familia debe reflexionar sobre una ocasión en que él o ella ha experimentado la presencia y la sabiduría de Dios en su vida. Reúnanse alrededor de una vela prendida e inviten a cada persona a decir su historia. Después de cada historia, todos deben rezar: Oh Dios, te alabamos.
• Juntos evalúen las relaciones de los miembros de la familia. ¿Nos tratamos entre sí como verdaderos hermanos o hermanas en Cristo? ¿Cómo podemos mejorar nuestras relaciones entre sí? Pidan a sus familiares que den ejemplos concretos de cómo pueden y van a mejorar.
• Comenten con su familia lo que significa vivir como un discípulo en el mundo de hoy. ¿Qué riesgos se corren? Recuerden a la familia que su amor y apoyo deben ayudarlos a seguir a Jesús en tiempos difíciles.